El arrepentimiento y el juego de apuestas

Resumen

El arrepentimiento requiere el abandono del juego de apuestas, pero también puede requerir cierta clase de restitución.

Pregunta

«Entiendo que el arrepentimiento requiere que se deje el juego de apuestas. Pero, en el caso del apostador que ha ganado dinero y se arrepiente, ¿tiene él que devolver el dinero que ganó a la compañía que promueve el juego de apuestas? Gracias por su ayuda con esta pregunta».

Respuesta

Un ladrón de autos que se arrepiente debe dejar de robar autos, y es razonable que haga alguna restitución, especialmente si todavía tiene algunos de los autos robados en su posesión. El hombre que ha «robado» a la esposa de otro hombre (i. e., ha cometido adulterio; Mateo 19:9), no puede conservarla si está arrepentido. Por otra parte, el hombre que ha quitado la vida a una persona y que deja el homicidio cuando se arrepiente, realmente no puede proveer restitución completa (i. e., no puede devolver la vida). Pero el hecho de que el homicida no pueda restaurar la vida al muerto no quiere decir que el arrepentimiento sea imposible en su caso.

Alguien que ha ganado dinero de una organización de apuestas (e. g., de un casino, hipódromo o lotería estatal) y que se arrepiente, puede no tener la oportunidad de devolver el dinero. Incluso si pudiera hacerlo, devolver el dinero a una organización que no es dueña directa del dinero, sino que facilita y promueve el fondo de apuesta de una diversidad de fuentes, no cumpliría el propósito proyectado; simplemente no se puede devolver el dinero a los afectados. Sin embargo, si la conciencia revela que existe la necesidad de restaurar la influencia personal ante el pueblo de Dios, el apostador que ha ganado una gran suma de dinero de una organización y se ha arrepentido, puede optar en disponer de tal dinero de una manera caritativa.

Por otra parte, en el caso de alguien que ha ganado dinero apostando con otras personas (quienes frecuentemente no pueden costear ni sus propios gastos pero que apuestan de todas formas), devolver el dinero puede ser útil en dos sentidos. Primero, la persona de quien se ganó el dinero puede necesitarlo, y tal acción no solamente puede aliviar su carga financiera sino también puede influenciarla a usar sus fondos apropiadamente en el futuro. Segundo, la devolución del dinero puede demostrar a otros que el apostador se ha arrepentido sinceramente; tal ejemplo puede influenciarlos adicionalmente.

En áreas en que la Biblia no provee detalles específicos, se debe tratar de determinar los principios bíblicos y aplicarlos adecuadamente a la conducta y la conciencia. Debemos tener cuidado de no crear leyes cuando Dios no las ha creado, pues el cristianismo ya es lo suficientemente desafiante sin las cargas que los seres humanos imponen (cf. Gálatas 1:6-9; Apocalipsis 22:18-19). Podemos conocer la verdad que nos hará libres (Juan 8:32), tal verdad por la cual seremos juzgados al final del tiempo (Apocalipsis 20:12-15).